Cuando se usan términos referentes a un período histórico determinado, se habla de generalizaciones, no de cuestiones delimitadas. Es normal, más en las artes, el moverse de diversas formas, esto significa que dependiendo el lugar y el contexto el arte fluye de determinada manera, y como no es universal en todo el sentido de la palabra, en algunos lugares suceden cosas diferentes y, por consiguiente, las formas de expresión artística también son diferentes. Algunos términos utilizados en las artes, cómo barroco, clásico y romántico, se refieren a las características estilísticas principales de determinada época. Por ejemplo, para separar o diferenciar el termino clásico, que se utiliza para hablar de cosas que por el tiempo se vuelven clásicas, antiguas, o confundirlos por lo referido a los períodos clásicos de antiguas civilizaciones, griegas y romanas, surge el termino neoclasicismo, que es el termino que define lo que en realidad sucedía en este período.
Otra contextualización del término clásico es el aplicado a el período de la música comprendido desde la segunda mitad del siglo XVIII hasta principios del siglo XIX, que en música es el termino más utilizado para referirse a ese período determinado. Debido a esto, a el período comprendido en la música de la segunda mitad del siglo XVIII se le conoce con el término clasicismo, por su analogía con las demás artes, evitando el termino neoclásico, que vendría a significar la reconstrucción directa de la música de la antigüedad.
La historia, incluida la historia de la música, estudia lo que los hombres y mujeres dejan a través de sus obras, no se enfoca tanto en los datos cuantitativos, como la fecha de nacimiento y de su muerte. Esto genera la necesidad de utilizar términos estilísticos, para nombrar las cosas. Al inicio estos términos no fueron una regla, no había una norma para nombrar igual a lo englobado en el término, al ser utilizados con frecuencia y debido al uso que se les daba, con el hecho de que definían lo que representaban, fueron quedándose con el tiempo. Retomando la línea de que en las sociedades no sucede lo mismo y que en esos momentos no era tan sencillo conocer lo que sucedía a lo largo del mundo, fueron usándose términos diferentes, que con el tiempo se fueron cambiando y unificando.
Hay una razón coherente por la cual llamarle clásico a este período específico, gran parte de este incorpora cualidades estéticas generales que se asocian con el clasicismo, entre ellas están la universalidad y el alcance, la verdad e integridad, equilibrio y orden. La función de la música ya no radica en a imitación de la naturaleza, sino en la expresión simbólica del más alto orden. Si estudiamos lo que se conoce de las civilizaciones conocidas y las tomamos como si fuera una línea evolutiva en línea recta (que casi nunca se puede tomar como línea recta la evolución, por así decirlo de una sociedad.), sería como el tercer período clásico de las civilizaciones europeas, sin mencionar que casi toda civilización precolombina posee un período clásico que generalmente es el de máximo esplendor y prosperidad.
*-A todos estos términos hay que tenerlos en cuenta y dependiendo del contexto en que se encuentren pueden significar cosas diferentes e incluso contrarias a las antes descritas, esto es debido a que no existe una estandarización o un escrito universal que establezca qué y cuales términos son los mejor utilizados o los que más corresponden a determinado período/estilo/momento histórico. La versatilidad de estos e incluso dependiendo de los autores, pueden ser aceptados o no, pero todo depende de la información que se quiera dar a conocer utilizándolos.
Por: Camilo Flores Narváez.